Continuamos con nuestra sección «Conoce la librería de tu barrio», donde hacemos un repaso de librerías que nos gustan aquí, en Libros Crudos. En esta entrega, le toca el turno a Tipos Infames, en Madrid. Tipos Infames son Alfonso Tordesillas, Gonzalo Queipo y Francisco Llorca y ésta es su librería:
Presentadnos brevemente vuestra librería.
Tipos Infames es una librería que ofrece algo más. En la creencia de que era necesario actualizar el modelo de librería tradicional hemos optado por la especialización (narrativa literaria) y la diversificación en cuanto a la actividad. En Tipos Infames hemos incorporado una cafetería, una bodega, una sala de exposiciones y un espacio abierto a la cultura. Nos gusta definir nuestra librería como un lugar en el que ocurren cosas.
¿Qué os llevó a convertiros en libreros?
Siempre habíamos tenido la idea de hacer algo juntos y llegó un momento en el que teníamos mucho que ganar y poco que perder… como siempre habíamos estado ligados de una u otra forma al mundo de la cultura y los libros ocupaban mucho de nuestro tiempo (leyéndolos o hablando de ellos) decantarnos hacia este negocio fue un paso natural.
¿Han cambiado últimamente las cosas en el negocio? ¿Qué tal os va?
Efectivamente, las cosas están cambiando y no hay que negarlo. A la situación general –ya de por si inestable- hay que sumar lo incierto del mundo del libro, inmerso en una crisis propia y en un cambio de paradigma que transformará el negocio tal y como lo conocemos. Sin embargo, ser realista no implica ser apocalípticos necesariamente. Aprovechamos todas las ventajas de la digitalización y apostamos por la conllevancia de los formatos. Nosotros llevamos tres años abiertos y esperamos seguirlo por mucho tiempo…
¿Por qué necesitamos librerías «físicas»?
Porque suponen un punto de encuentro, un lugar de intercambio. Todos reconocemos que los libros en papel ofrecen una experiencia de lectura diferente a los digitales. En el mismo sentido el contacto directo con los libreros, con los lectores y los libros, conforman una comunidad y unos vínculos completamente diferentes a los que puede ofrecer un foro o una red social.
¿Cuál creéis que es la fórmula para sobrevivir en este negocio?
Especializar el producto, diversificar la actividad y profesionalizar el servicio.
¿Soléis hacer presentaciones u otro tipo de actividades en vuestra librería?
Organizamos todo tipo de actividades: presentaciones, recitales, catas de vino, exposiciones… en ocasiones nos acercamos más a la idea de centro cultural que a la de una librería tradicional. La idea es mantener vivo el espacio y crear sinergias entre todos los agentes culturales.
¿Qué es lo que más os gusta de vuestra librería? No podéis decir que los clientes…
Lo cierto es que gracias a ella hemos conocido muchísima gente interesante. Somos una librería con parroquianos y lo cierto es que ese contacto es enriquecedor. Pero si no nos dejáis dar esa respuesta diremos que poder contagiar nuestro entusiasmo por ciertos títulos, apoyar autores jóvenes, promocionar editoriales independientes… hacer de nuestras filias bandera.
¿Os parece importante apostar por editoriales pequeñas?
Es fundamental porque en ellas está muchas veces el riesgo y la calidad que, en ocasiones, grandes sellos sacrifican en aras de otros parámetros. En Tipos Infames apostamos por ellas (y ellas por nosotros, ojo).
¿Cuáles son vuestros objetivos a corto y largo plazo?
Nosotros trabajamos día a día. Cada semana que seguimos es un triunfo… así que podemos decir que consolidarnos es nuestra gran apuesta.
Decidnos qué 3 autores son vuestros favoritos ahora mismo. ¿Algún libro que os haya sorprendido últimamente?
¡Uf! Es una pregunta difícil porque en nuestra lista de los tres mejores escritores hay cientos de nombres… pero si tenemos que elegir escritores cuyas obras nunca faltan en Tipos Infames diríamos Patrick Modiano, David Foster Wallace y Antonio Orejudo (por ejemplo). En cuanto a un título en concreto podríamos recomendaros Donde dejé mi alma de Jérôme Ferrari, de lo mejor que hemos leído en lo que va de año.